Tipos de grasa corporal y cómo reducirla
En nuestro cuerpo existen diversos tipos de grasa que desempeñan distintas funciones. Conoce los mejores tratamientos para combatirla.
Funciones de la grasa en nuestro organismo
La grasa corporal es un componente fundamental del organismo, completamente necesaria para su correcto funcionamiento. Entre las funciones que cumple la grasa presente en el cuerpo, podemos destacar las siguientes: protege los órganos vitales, cubre y amortigua las articulaciones, contribuye a mantener y regular la temperatura corporal, almacena vitaminas y otros nutrientes esenciales y es una fuente de reservas de energía para el organismo.
¿Qué porcentaje de grasa corporal es saludable?
La grasa es una parte esencial de nuestro cuerpo. Muy poca o demasiada grasa no es saludable. Hay que tener la cantidad adecuada, pero esta cantidad varía de persona a persona.
Según el American Journal of Clinical Nutrition, existen porcentajes saludables de grasa corporal según la edad.
- Para las personas de 20 a 39 años, las mujeres deben aspirar a tener entre un 21% y un 32% de grasa corporal. Los hombres deberían tener entre el 8% y el 19%.
- Para las personas de 40 a 59 años, las mujeres deberían caer entre el 23% y el 33% y los hombres deberían caer entre el 11% y el 21%.
- Si tienes entre 60 y 79 años, las mujeres deberían tener entre un 24 % y un 35 % de grasa corporal y los hombres deberían tener entre un 13 % y un 24%.
Las mujeres naturalmente tienen un mayor porcentaje de grasa corporal que los hombres. Su grasa corporal también aumentará naturalmente a medida que envejecen.
Tipos de grasa corporal según su ubicación
La grasa también se comporta de manera diferente dependiendo de dónde se encuentre: en el abdomen, en el muslo o cerca de los órganos. Cuando se trata de salud, la ubicación importa.
Grasa visceral o grasa dura
La grasa almacenada profundamente en el abdomen y alrededor de los órganos tiene un impacto importante en el hígado, un órgano fundamental para el metabolismo. También está relacionado con enfermedades como las cardiovasculares, el cáncer, el asma y la demencia. La sangre que sale de la grasa visceral va directamente al hígado y trae consigo todo lo que produce el tejido adiposo, incluidos ácidos grasos, hormonas y proinflamatorias. Acumulamos más grasa visceral con la edad. El almacenamiento de grasa se desplaza de la parte inferior del cuerpo al abdomen, especialmente en las mujeres.
Grasa subcutánea o grasa blanda
La grasa que se encuentra justo debajo de la piel es la más abundante del cuerpo. Este tipo de grasa actúa de manera diferente dependiendo de dónde se encuentre. La grasa abdominal subcutánea produce más ácidos grasos, lo que puede aumentar la resistencia a la insulina y el riesgo de enfermedades metabólicas. La grasa subcutánea de la parte inferior del cuerpo, por otro lado, capta y almacena grasa de manera eficiente. Se considera protector contra las enfermedades.
Grasa intermuscular
La grasa intermuscular suele ser la definición más amplia de infiltración grasa en el músculo, refiriéndose al almacenamiento de lípidos en los adipocitos debajo de la fascia profunda del músculo. Esto incluye el almacenamiento visible de lípidos en los adipocitos ubicados entre las fibras musculares (también denominada grasa intramuscular) y también entre grupos de músculos (literalmente intermusculares). Es proporcionalmente el tipo de grasa con menor presencia en el cuerpo. A medida que envejecemos, la grasa intermuscular tiende a incrementarse tanto en hombres como mujeres.
Tipos de grasa corporal según su función en nuestro cuerpo
Si bien todas las células grasas pueden parecer iguales desde el exterior, pueden tener diferentes funciones, según su tipo. Hay tres tipos principales de células grasas.
Grasa parda
Lo que hace única a la grasa parda, o termogénica, es que quema energía y produce calor en ciertas condiciones, como el clima frío. Las personas con más grasa parda tienden a ser más delgadas y saludables, en comparación con aquellas con menos grasa parda. Los estudios demuestran que la grasa parda mejora el metabolismo y reduce el riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2, la enfermedad de las arterias coronarias y la presión arterial alta. Se encuentra en el cuello, la parte superior del pecho, los hombros y el estómago.
Grasa blanca
Son el principal tipo de células grasas del cuerpo. Almacenan energía y producen hormonas como la leptina y la adiponectina. Se encuentran principalmente en el pecho, el abdomen y las piernas.
Grasa beige
En algunos casos, la grasa blanca se transforma en células grasas “beiges” o “brite”. Al igual que la grasa parda, quema energía para producir calor.
Cómo eliminar los distintos tipos de grasa
En líneas generales, la mejor manera de perder cualquier tipo de grasa es mantener un estilo de vida saludable, combinando adecuadamente patrones dietéticos y rutinas de ejercicio físico entre otras medidas.
- Dieta: Es importante ingerir menos calorías de las que quemas. La dieta debe incluir proteínas magras, cereales integrales, lácteos bajos en grasa, frutas y verduras. La proteína aporta un efecto saciante. Es aconsejable reducir la cantidad de carbohidratos, azúcares, sal y carnes rojas en la dieta.
- Ejercicio: Como el cuerpo almacena energía en forma de grasa, para eliminarla es clave quemar calorías. Los principales ejercicios que favorecen la eliminación de calorías son los aeróbicos, de fuerza y el entrenamiento en intervalos de alta intensidad (este tipo de entrenamiento alterna series de esfuerzo intenso y recuperación rápida).
- Sueño: Dormir muy poco aumenta el hambre y predispone a consumir alimentos ricos en carbohidratos y calorías. Desarrollar una rutina nocturna que no incluya pantallas ni comidas pesadas justo antes de acostarse es un hábito recomendable.
- Reducción del estrés: El estrés activa una hormona llamada cortisol. Demasiado cortisol puede limitar la capacidad para perder peso porque indirectamente pide al cuerpo que retenga el exceso de grasa.
En el caso de la grasa visceral se ha visto que la práctica del ayuno intermitente podría ser una estrategia adicional eficaz.
Es importante tener en cuenta que no existe una solución mágica para reducir la grasa corporal. La pérdida de peso saludable requiere tiempo y esfuerzo, así como un compromiso a largo plazo.
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